A este concierto fui con Rosa y Elena, es la segunda vez que veo a Alberto Cortez y siempre en el Bergidum. Como la primera vez, con el primer tema me engancho hasta el final del concierto, los músicos que le acompañarón fueron un pianista, un bajo y un bateria, me gustó mucho el pianista.
Despues del concierto fui de cena con los compañeros de trabajo, a las jornadas gastronómicas de Bierzo, y al salir de cenar coincidimos con el pianista y el percusionista que andaban buscando una cafeteria, Rosa enseguida les dió un par de besos y les animó diciendo que el conciero estuvo muy bien.
Rober.
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