"Tal vez lo maté al primer disparo, o así debería haber sido, pero yo no había conseguido expulsar todo el veneno que llevaba dentro. Aguardé un rato interminable y anhelé que me contemplara una gran multitud, porque me sentía como si fuera a hacer unas declaraciones: el arma hablaría en mi nombre, borraría mi frustación. Era una catarsis. Una Epifanía con una Colt45...."
lunes, 28 de marzo de 2011
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